Fundamentos de la riqueza IV

Requisitos de la moneda

Ya hemos visto que, para que pueda existir el intercambio de riqueza, es necesario disponer de una forma de realizar el intercambio (sea la plaza del mercado o Internet) y una moneda para poder realizar el doble cambio de Riqueza en Valor y de valor en Riqueza.  Pero, una vez llegados a esta conclusión, los participantes en nuestro mercado deberán ponerse de acuerdo en cómo debe ser esa moneda. Algunas características son claras, a la vista de los problemas del primer mercado.

-          Deberá tener unidades lo suficientemente pequeñas para dar valor a los elementos de riqueza más pequeños susceptibles de intercambio, como un alfiler, una manzana, etc.             

-          Deberá tener unidades lo suficientemente grandes para dar valor a los elementos de riqueza más grandes susceptibles de intercambio, como una vaca o diez, un carro… El conjunto de las monedas resultado de una transacción no puede exceder el peso que un individuo puede llevar con comodidad.

-          Estas unidades deberán ser cuantificables con precisión. Deberá ser fácil contar el número de unidades.

-          Deberá existir un mecanismo neutro de conversión de monedas grandes en pequeñas y viceversa.

-          Debe ser inmutable en el tiempo, al menos en un alto grado. Nuestro hombre del carro no quiere comprar cien kilos de manzanas o cincuenta gallinas, por lo que muchas de las monedas que obtenga por la venta querrá guardarlas para intercambios futuros. Por lo tanto, exigirá que esas monedas mantengan su valor a lo largo del tiempo.

-          Deberá ser universalmente aceptada por todos los participantes en un mismo mercado.

-          Deberá existir en cantidad suficiente para permitir las mayores transacciones susceptibles de ejecutarse en ese mercado e incluso permitir una gran acumulación durante largos períodos para garantizar que los participantes en mercados futuros no se queden sin monedas de intercambio.

-          No deberá existir o ser muy escasa en forma libre, ya que la prueba de su valor es el haber sido obtenida por intercambio. Por ejemplo, la arena de la playa no sirve como moneda, ya que no se podría distinguir la arena obtenida por intercambio, que habría adquirido su valor en el intercambio, de la cogida en la playa, que carece de valor

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